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 Son robustos, primitivos, rústicos y a la vez esbeltos y elegantes.
La longitud de la punta del hocico hasta los ojos es igual a la de los ojos y el occipital. La longitud del cuerpo es cuatro veces la del cuello.
De cabeza larga y estrecha en forma de cono truncado.
El cráneo es largo y aplanado.
Orejas estrechas y móviles.
Esqueleto fuerte.
Pelo: duro y liso.
Colores: blanco, rojo, blanco-rojo, amarillo leonado.
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 Necesitan gran cantidad de espacio para poder correr, saltar y hacer ejercicio.
Son muy dóciles con sus amos, pero desconfiados con los extraños.
Su educación necesita atención particular.
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 Parecen ser tímidos y desconfiados, pero cazando son atentos, astutos y muy ágiles.
Son cazadores independientes.
Tienen un trote sostenido característico.
Son solitarios y sin necesidad de ningún punto de apoyo.
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 Sus orígenes se encuentran en la antigüedad.
El dios egipcio Anubis (dios de los muertos) tenía por cabeza la aun podenco y en la tumba del Tut-Auk-Animon el guardián también lo era.
La leyenda egipcia dice que cierta diosa hacía tirar su carro por podencos, que éstos se equivocaron y que la diosa los expulsó de Egipto y los envió a una isla (Ibiza).
Parece ser que llegaron con las expediciones fenicias.
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 Un sólo perro puede cazar liebres, aves e incluso caza mayor.
Si son varios perros sólo puede haber un macho, ya que varios se pelean.
Cazan mediante el olfato y la vista.
En la caza, tanto diurna como nocturna, de conejos sin fusil, rastrean con gran olfato y agilidad.
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Pros:
- Inteligente.
- Dócil.
- Apegado a su amo.
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