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La figura del Perdiguero de Burgos es, quizás, no tan estilizada como otras razas de su grupo (como por ejemplo la del Pointer inglés), pero transmite una clara sensación de robustez, gracias a su porte más cuadrado.
Cosas a destacar son sus largas orejas plegadas y los dos grandes pliegues en forma de papada.
El pelo es corto y presenta dos variaciones de color: una, donde el color básico, está manchado y/o combinado con marrón pardo y otra, donde el color básico es el pardo que se encuentra, en este caso, moteado de blanco.
La cola se suele amputar a un tercio de su longitud original.
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Si es mantenido en su ambiente natural los cuidados que solicita son escasos, dada su perfecta adaptación a su medio ambiente.
Como otras muchas razas de perros de caza requiere grandes dosis de ejercicio diario y grandes espacios abiertos donde correr.
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Es un perro afable y tranquilo que no suele sobresaltarse fácilmente.
Es inteligente y aprende con facilidad lo que se refiere a sus faenas de caza.
No es un perro que se adapte bien a ambientes urbanos.
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Es una raza antigua originaria de la Meseta castellana, que está muy poco difundida fuera de nuestras fronteras.
Es muy probable que esta raza haya participado en la creación de otras razas de este grupo.
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Como tantas otras razas de este grupo es un perro cazador, exclusivo de ambientes campestres, y que no se ha utilizado en otros menesteres.
Dentro de la caza esta raza es calificada como "de rastro y muestra" (por su fino olfato).
Se le utiliza tanto para la caza de pelo (conejos, liebres, etc.) como para la de pluma (aves).
Es perfecto para la caza en cualquier terreno (por difícil que sea), ya que tiene una resistencia física y velocidad envidiable.
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Pros:
- Perro tranquilo y afable.
- Excelente cazador.
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